¿Qué son los bancos del Tiempo?
El Banco del Tiempo es una iniciativa cuyo objetivo es fomentar de una manera comunitaria los servicios de cooperación y solidaridad entre las personas con el propósito de mejorar la calidad de vida de las mismas. Asimismo, el Banco del Tiempo promueve la modificación de actitudes para revalorizar el trabajo del ámbito familiar y distribuirlo de una manera más equitativa entre los hombres y las mujeres. Por otra parte, esta iniciativa quiere romper el aislamiento, la soledad de la vida urbana, y crear un nuevo espacio capaz de compartir, de acercar a las personas e intentar desarrollar en la práctica los valores de anticonsumismo, de cooperación y de solidaridad. Las personas inscritas en el Banco del Tiempo intercambian servicios y actividades, y la unidad de intercambio y de valor es siempre la misma para todos: el tiempo. Los logros de esta iniciativa consisten en que se da mayor visibilidad y valoración a las tareas del ámbito personal, lo cual permite un cambio de actitudes y conciencia del reparto y organización del trabajo doméstico, así como el fomento de la cooperación entre los miembros de una misma comunidad. Asimismo, el Banco del Tiempo desprende toda una serie de valores colaterales de gran importancia y valor: intercambios intergeneracionales, mejora de la calidad de vida, valores de dar y recibir, compartir, autoestima, mayor relación interpersonal, integración social, altruismo y solidaridad.
¿Por qué surgen los Bancos de Tiempo?
La situación antes del comienzo de la iniciativa del Banco del Tiempo, se enmarca en la creciente incorporación femenina al mercado laboral sin el abandono por parte de las mujeres del papel tradicional e informal de cuidadoras del hogar. Esto generaba una disminución sustancial de su tiempo personal y una obstaculización de la entrada y permanencia de éstas en el mercado laboral. Asimismo, las tendencias de la sociedad actual dificultan las relaciones sociales de reciprocidad y ayuda mutua, aspecto de gran importancia para la integración social y la mejora de las relaciones vecinales. Esta iniciativa se había empezado a desarrollar en Italia hace unos años (La Banche del Tempo), pero en España no había ninguna iniciativa específica al respecto.
¿Qué prioridades se dan en estos Bancos?
Las prioridades de la iniciativa del Banco del Tiempo se establecen básicamente en torno a dos ejes principales: primero, promover la igualdad de oportunidades dando mayor visibilidad a las tareas del ámbito doméstico y, segundo, fomentar los valores de ayuda mutua y comunitaria mediante el intercambio de tiempo entre personas. Estas prioridades se basan en el empoderamiento de la vecindad, en la aceptación y receptividad a la diversidad social y cultural, en la posibilidad de adaptación y transferencia y en la igualdad de género e inclusión social. Todos los agentes implicados en la iniciativa se han involucrado en el establecimiento de las prioridades mencionadas.
Los principales objetivos del Banco del Tiempo son los siguientes: promover los intercambios entre las personas de la comunidad vecinal fomentando los valores de cooperación y comunicación y activando la red de solidaridad de la propia comunidad así como la participación social. Generando actitudes positivas entre las personas, aprendiendo a dar y recibir; incidir en los mecanismos que hacen de la organización social del tiempo y de las diferencias en su uso un elemento de desigualdad de género; fomentar la integración de la diversidad cultural y social en el ámbito comunitario y promover la ayuda mutua y el intercambio de experiencias.
Las estrategias de esta iniciativa consisten en que cada persona adscrita al Banco del Tiempo se ofrece para realizar actividades o servicios que le gusten a cambio de pedir otros que desee o necesite. El valor de todos ellos siempre es el mismo: el tiempo del intercambio, independientemente del servicio intercambiado. Dos peculiaridades han de ser tenidas en cuenta: la primera es que los intercambios son multirrecíprocos (yo puedo solicitar un servicio a alguien y le deberé el tiempo al Banco, no a la persona que me lo ha hecho). La segunda es que se pueden hacer intercambios de carácter grupal (una persona puede hacerle una actividad a un grupo), lo cual genera mayor dinamismo y fomento de las relaciones sociales.
Cada persona dispone de un «Talonario de Tiempo» que utiliza en el momento de solicitar tiempo de otra persona para algún servicio concreto que necesite. Mensualmente informa al grupo gestor del Banco del Tiempo (4 ó 5 personas de la asociación civil correspondiente) del tiempo efectivamente utilizado y recibido. El grupo gestor anota estos intercambios y actualiza el saldo de la cuenta corriente de tiempo de sus socios/as. Asimismo, edita periódicamente un Boletín de los servicios que se pueden intercambiar y que progresivamente va en aumento a medida que se adscriben nuevos/as socios/as. El grupo gestor también avisa cuando alguien tiene un desequilibrio de tiempo (tanto por exceso como por defecto) y organiza encuentros de socios/as con el objetivo de fomentar la confianza entre los miembros y la dinamización de los intercambios.
El proceso para poner el banco del tiempo en marcha
El proceso de puesta en marcha del Banco del Tiempo requiere de una serie de fases: una primera de sensibilización y difusión del proyecto a nivel comunitario e institucional en el ámbito local específico donde se vaya a iniciar; una segunda de programación donde se establecen las relaciones de cooperación entre comunidad, entidad promotora (administración local correspondiente) y el grupo gestor, además de la organización interna del Banco del Tiempo; una tercera de puesta en marcha basada en la presentación pública del proyecto con horarios concretos. Y por último, la fase de evaluación y reformulación, habitualmente un año después, con el objetivo de valorar el proyecto y realizar los ajustes oportunos (horario más amplio, ampliación o relevo del grupo gestor, etc.).
En cuanto a los problemas confrontados en la implementación de la iniciativa, cabe destacar que el intercambio de servicios relacionados con aspectos de cuidado a otras personas (niños, ancianos, etc.) generaba desconfianza porque las personas no se conocían; esto se ha superado organizando periódicamente reuniones donde las personas socias del Banco del Tiempo se reúnen, intercambian experiencias y se conocen, generando la confianza suficiente para propiciar intercambios. Otro de los problemas que surgió fue que al iniciar el proyecto los servicios giraban normalmente en torno a temas de cuidado de personas y ayuda doméstica, con lo cual la oferta era más limitada, pero a medida que se inscriben más personas socias, la oferta de servicios también crece y se hace más heterogénea, lo cual ofrece más oportunidades para el intercambio.
Por último, mencionar que la iniciativa requiere de una dinamización continua con el objetivo de fomentar la diversidad de intercambio y poner en práctica nuevas estrategias, como por ejemplo, los intercambios grupales, las visitas o salidas guiadas o los intercambios en las propias sedes de Bancos del Tiempo que permiten una mayor flexibilidad y comodidad para ambas partes.
La participación de las partes implicadas (la Asociación Salud y Familia, el Ayuntamiento de Barcelona y las entidades civiles correspondientes de cada Banco del Tiempo) participan de manera activa aportando cada una de las mismas los recursos necesarios para el óptimo funcionamiento.
- La Asociación Salud y Familia presta el siguiente apoyo: información, asesoramiento y seguimiento técnico continuo de cada Banco del Tiempo, así como difusión de la experiencia a nivel local, regional y estatal. También asesoramiento en las campañas publicitarias de difusión y en la formación inicial y de seguimiento del grupo gestor. Asimismo lleva a cabo la planificación, coordinación y organización de una jornada anual de Bancos del Tiempo como actividad de difusión e intercambio de experiencias entre los Bancos del Tiempo de España y de otros países (Italia, Portugal, Francia, Reino Unido, Estados Unidos, etc.).
- El Ayuntamiento de Barcelona aporta financiación económica e infraestructural mediante la cesión de un espacio en centros cívicos municipales para la ubicación de la sede de los diferentes Bancos del Tiempo.
- La Asociación/es del barrio donde se desarrolla el proyecto prestan su apoyo con la participación voluntaria de varias personas para formar el grupo gestor del Banco del Tiempo y responsabilizarse de su funcionamiento y dinamización.
Al iniciar el primer Banco del Tiempo se tuvo en cuenta la experiencia de los Bancos del Tiempo de Italia y participaron en el asesoramiento los Ayuntamientos de Venecia y Milán, así como la Asociación Parsec de Bolonia dado que la experiencia de esta iniciativa allí había sido altamente exitosa. Este asesoramiento permitió poner en marcha la iniciativa con las herramientas adecuadas para su buen funcionamiento y continuidad, tal y como se ha comprobado con posterioridad.
Resultados obtenidos
En cuanto a los resultados alcanzados en el proyecto cabe destacar que se genera una mayor participación vecinal en los intercambios y a su vez esto genera una mayor diversidad de servicios a intercambiar. Asimismo, el Banco del Tiempo se ha consolidado como un instrumento para la conciliación de la vida familiar y laboral dado que permite una descarga del tiempo, sobre todo para las mujeres. Es conveniente destacar que las acciones colectivas (reuniones de socios/as, encuentros entre diferentes Bancos del Tiempo, intercambios grupales,...) permiten la consolidación de los Bancos del Tiempo como herramienta para conseguir actitudes positivas entre las personas y como marco de fomento de los intercambios. Por tanto, aspectos como la mejora de la calidad de vida de las personas, los cambios de actitudes de la ciudadanía y la promoción de la igualdad de oportunidades quedan claramente reflejados en esta iniciativa generada gracias a la coordinación y colaboración conjunta de diferentes organizaciones e instituciones locales.
Lecciones aprendidas
Las lecciones aprendidas desde nuestra experiencia se basan en diferentes aspectos: el primero de ellos es la importancia de realizar una buena difusión del proyecto antes y durante la implementación del mismo para poder implicar tanto a las asociaciones que van a gestionar el proyecto como a las personas que van a participar directamente con sus intercambios de servicios. Por este motivo, también es muy importante realizar una tarea continua de dinamización de los intercambios que genere una mayor diversidad de los mismos y más oportunidades de encuentro. Otra de las lecciones aprendidas es que es interesante realizar reuniones entre los diferentes Bancos del Tiempo a nivel local y estatal, porque el intercambio de experiencias es altamente gratificante y genera una mayor implicación en la iniciativa. Por último, destacar que otra lección aprendida es el hecho de que cada Banco del Tiempo posee sus propias características, no tanto a nivel de funcionamiento (funcionan todos de la misma forma), sino a nivel de determinadas particularidades: el perfil de los socios/as (más jóvenes, más o menos heterogéneo,...), las características de los intercambios (de unos servicios más que de otros), la difusión en el barrio, etc. Esto implica ver cada Banco del Tiempo como un proyecto único y con características concretas, lo cual genera una alta diversidad de los mismos y una mayor riqueza sociocultural.
